El Teide y las cumbres de Tenerife renuevan su certificación Starlight hasta 2025
La Fundación Starlight ha renovado las certificaciones del Parque Nacional del Teide y las cumbres de Tenerife como Destino Turístico Starlight y Reserva Starlight. Esto avala la calidad del cielo tinerfeño para la observación de estrellas y su posicionamiento como destino para el astroturismo en Europa. Ambas certificaciones se prolongarán hasta 2025; fecha en la que tendrá lugar una nueva evaluación.
La calificación de Reserva Starlight a las Cumbres de Tenerife, con núcleo en el Parque Nacional del Teide y una zona adyacente delimitada por la Corona Forestal, implica la existencia de un compromiso por la defensa de la calidad del cielo nocturno y el acceso a la luz de las estrellas en el que se mantienen intactas las condiciones de iluminación natural y nitidez.
El Parque Nacional del Teide registra un enero inusualmente lluvioso y frío.
Las estaciones meteorológicas de este espacio protegido recogen índices de pluviometría muy superiores a los de los últimos inviernos.
La estación de de mayor altura de Montaña Blanca, que en 2020 dio cuenta de tan solo un litro por metro cuadrado; en los primeros ocho días de enero llegó a contabilizar 234 litros por metro cuadrado.
El Parque Nacional del Teide ha registrado un mes de enero con unos índices de pluviometría muy superiores a los de los inviernos pasados, lo que se traduce en una buena noticia para la biodiversidad de este espacio protegido de alta montaña.
Las estaciones meteorológicas del Parque Nacional han constatado, en los primeros días de 2021; una pluviometría muy superior a la de los últimos años durante en el mes de enero entero. Por ejemplo; en la estación del Portillo de la Villa este año se llevan anotados 92 litros por metro cuadrado, mientras que en todo el mes de enero de 2020 solo se contabilizaron 3 litros por metro cuadrado.
La estación meteorológica de la Fortaleza ha acumulado en enero aproximadamente 106 litros por metro cuadrado. Mientras que en el mismo mes del año pasado tan solo 2 litros por metro cuadrado.
Más interesante fue la estación a mayor altura de Montaña Blanca, que en 2020 dio cuenta de tan solo un litro por metro cuadrado, pero en los primeros ocho días de enero llegó a contabilizar 234 litros por metro cuadrado.
No obstante, las estaciones al sur del Parque Nacional registraron valores más bajos y la nieve fue prácticamente inexistente, por ejemplo, en Boca Tauce se han datado algo más de 50 metros por metro cuadrado en los primero ocho días de enero.
En lo que va del mes de enero ha caído tres veces más lluvia que la indicada en el mismo mes de 2012; el año más seco del cual se tiene constancia, y casi tanto como en los doce meses del año 2017, el último año seco registrado.
A estos índices de precipitaciones hay que sumar un descenso acusado de las temperaturas, con valores mínimos de unos -12 grados centígrados.
“El comienzo del invierno se está comportando como corresponde según la serie histórica de más de un siglo de datos en esta parte de la isla; fuertes lluvias, bajas temperaturas y presencia de nieve es lo que corresponde a esta época del año. Si acaso lo que no es tan usual es la tromba de agua concentrada en unos pocos días”.
Biólogo del parque, José Luis Martín Esquivel.
Toda esta situación hay que vincularla al propio desarrollo biológico de las especies que habitan en el Parque, y por ello el biólogo indica que:
“habrá que ver si se consigue revertir el deterioro progresivo de muchos rodales de retamas, amarilleados por el ataque de insectos y hongos y secos; con procesos de muerte súbita debido a la escasez de agua. El retroceso del retamar ha sido casi de un 1% de su cobertura cada año”,
quien ha añadido que:
“la lluvia reciente puede contribuir a recuperar las retamas secas que aún no han muerto o los castigados pinares de los alrededores del Portillo. Para ello; se requerirá que siga lloviendo el resto de la estación y que las temperaturas se mantengan bajas, así como que vuelva a nevar de nuevo de manera suficiente como para mantener la humedad del subsuelo”.
El Teide, entre los 47 espacios Patrimonio Mundial mejor conservados del planeta.
El Parque Nacional del Teide se mantiene entre la lista de la Unesco de los espacios Patrimonio Mundial en la categoría de bien natural y mixto natural-cultural, mejor conservados del planeta. Así se desprende del informe emitido por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza emitido en noviembre de este 2020.
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza es el órgano transnacional encargado de auditar los parajes declarados Patrimonio Mundial por la Unesco.
Cada año esta institución, emite un informe sobre el estado de estos bienes naturales. Hasta 2020, 213 espacios naturales y 39 bienes mixtos naturales y culturales, en todo el mundo, han sido declarados Patrimonio Mundial en 107 países.
El estado de estos espacios no siempre llega a los estándares que la propia Unesco reclama al ser declarados; solamente el 19% de estos bienes han aprobado sin ningún tipo de advertencia. Se trata de 47 espacios, entre los que se encuentra el Parque Nacional del Teide.
“Este informe evidencia que el trabajo que se realiza desde la oficina de Gestión del Parque Nacional es un ejemplo de buenas prácticas y que, una vez más, un organismo internacional de reconocido prestigio así lo considera”
Consejera de Gestión del Medio Natural y Seguridad del Cabildo de Tenerife, Isabel García.
Estos 47 bienes declarados Patrimonio Mundial aprueban con nota la auditoría de la UICN; mientras que 112 lugares se encuentran en buen estado con algunas indicaciones.
75 espacios tendrán que pasar una revisión significativa si quieren optar a mantener su catalogación. 8 sitios se encuentran en peligro crítico de perder la condición de Patrimonio Mundial; incluso dos de ellos; la Gran Barrera de Coral australiana y las islas del Golfo de California en México presentan una gran degradación respecto del análisis de 2017.
En el contexto europeo, el Parque Nacional del Teide se halla entre los 18 sitios mejor conservados; de un total de 54 lugares inscritos en el continente.
Los Parques Nacionales de Garajonay, en La Gomera y Doñana en la Comunidad Autónoma de Andalucía tienen ciertos problemas que los incluyen en la lista de espacios con “preocupaciones significativas’.
Mientras que otro espacio natural español, compartido con Francia; que es el entorno de Pirineos-Monte Perdido se halla en la categoría de ‘bueno con ciertas puntualizaciones’ en su conservación. En el caso de Europa no existen lugares Patrimonio Mundial en estado crítico.